La pobreza sigue galopando: familias que no pueden pagar el aguaLa noticia la recoge La Verdad de Murcia, pero es extensible a cada una de las provincias: cientos de familias que no pueden pagar el recibo del agua, que acuden a sus Ayuntamientos, a centros de caridad a pedir auxilio. El capitalismo sigue ahogándonos, cada minuto será peor que el anterior.
Más de 200 familias murcianas se enfrentan todos los meses a la desazón que provoca abrir el grifo y comprobar cómo no sale una gota de agua potable. El desempleo, la crisis y la insolvencia están detrás del creciente aumento de familias que tienen que arreglárselas, aunque sea por unos días, sin agua corriente, y que está desbordando a las organizaciones humanitarias que ayudan a las familias sin recursos. La situación es especialmente dramática en barrios como La Paz, La Fama, el Espíritu Santo de Espinardo o San Basilio, donde a diario se registran suspensiones de suministro o se reciben avisos y notificaciones de impago. Aguas de Murcia admite que a diario se registran entre 10 y 12 cortes de agua, pero insiste en que todos los casos han sido notificados y avisados conforme al reglamento, y están provocados por el impago de dos o más recibos (son bimensuales).
Los voluntarios de Cáritas en el polígono de La Paz no dan abasto para atender las demandas de ayudas de familias que han recibido el aviso para cortar el agua o ya se han quedado sin suministro. «El dinero se nos está acabando, y en un par de meses no vamos a poder seguir echando una mano a las familias más necesitadas para abonar sus recibos. En los últimos meses, la organización de la iglesia ha ayudado a más de 140 hogares a poner al día sus deudas con la empresa Aguas de Murcia, y ha mediado para fraccionar los pagos y reestablecer el suministro. «Las cuentas están ya muy ajustadas, y vamos a pedir al Ayuntamiento y Aguas de Murcia que exima del pago a a las familias que no pueden abonarlo. También estamos preparando un escrito al Defensor del Pueblo para que tome en consideración la declaración de Naciones Unidas, que reconoce el acceso al agua potable como un derecho universal, y perdone así el pago a las familias que no tienen recursos», expone Juan Antonio Muñoz Cano, voluntario de Cáritas en La Paz.
La Asamblea 15-M de La Paz, que ha elaborado un informe denunciado los cortes de agua en el barrio, también alerta de la precariedad en la que malviven decenas de vecinos del barrio, y apunta que la falta de recursos ha llevado a 155 hogares a solicitar a las ONG y a los servicios sociales «ayudas de urgencia» para hacer frente a los recibos del agua (en la mayoría de los casos) o de la luz.
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