El Fondo Monetario Internacional no tiene buenas relaciones con todos los países de la región, dijo el viernes Nicolás Eyzaguirre, su director para el Hemisferio Occidental.
Indicó, sin embargo, que la situación era comprensible debido a que algunas veces las proyecciones que realiza el organismo "son más negativas" de lo que calculan los gobiernos.
A raíz de las proyecciones del Panorama de la Economía Mundial-Abril 2009, difundido esta semana con motivo de la reunión de gobernadores del FMI y Banco Mundial en Washington, "hemos tenido varias expresiones de desazón", dijo Eyzaguirre en una rueda de prensa.
"No obstante no hay en este caso ningún tipo de animadversión contra país alguno", agregó.
Según el FMI, la región tendrá una contracción del 1,5% este año, arrastrada por el mal rendimiento de Brasil, México y Argentina, que terminarán con recesión en sus economías. Venezuela, un importante exportador de petróleo, está también en esa lista.
El gobierno de la presidenta Cristina Fernández emitió un comunicado para expresar su incomodidad. Dijo que el FMI, al proyectarle a Argentina una caída a -1,5% en el 2009 y recuperación a apenas 0,7% en 2010, estaba procedimiento con motivaciones políticas derivadas del hecho de que el país ya no acataba las recomendaciones de la institución.
Explicó que pese al "diálogo fluido" entre Argentina y el Fondo, el país "no consideraba apropiada" la intervención del FMI en la evaluación de su economía.
"Por lo tanto, la visión que tenemos de la Argentina es una visión un tanto más distante...", agregó.
El ex ministro chileno de Hacienda, que hablaba en español, usó luego la palabra en inglés "blurred" para referirse al estado de esas relaciones y pidió a sus asistentes que le ayudaran en la traducción.
Uno de ellos dijo "nublada", pero a Eyzaguirre no le pareció apropiado.
"Nublada sugiere mal tiempo", dijo. "Creo 'menos nítida' es la palabra que estoy tratando de usar porque no hemos tenido la oportunidad de cercanía que esta relación requiere".
Las relaciones FMI-Argentina se deterioraron a comienzos de la década cuando el país dijo que no estaba recibiendo la ayuda necesaria de la institución para superar la peor crisis económica de su historia, que le llevó a decretar una moratoria unilateral de su deuda pública y privada.
"Estamos listos para poder intensificar ese diálogo y llegar a un examen más completo que nos permita tener una capacidad de visualizar, aconsejar y proyectar la economía argentina lo mejor posible", dijo.
Eyzaguirre indicó, sin embargo, que Argentina se ha aproximado al FMI para pedirle ayuda por unos 2.500 millones de dólares en derechos especiales de giro, la moneda del Fondo y cuyo valor es ligeramente mayor que del dólar.
"Está bajo discusión y tiene que ser aprobado por el directorio", explicó. "Parece haber bastante consenso en torno a esto y debiera materializarse con relativa prontitud".
Por: Agencias / Aporrea. org
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