Varias asociaciones piden al Gobierno que amplíe los plazos para que las personas que viven fuera de sus países puedan votar en las elecciones municipales. Los más de dos millones de españoles que están en el extranjero de forma permanente tenían hasta hoy para registrarse en los consulados para rogar su voto. Los ciudadanos de la UE tenían el mismo periodo para cumplir los requisitos necesarios para poder ejercer su derecho el 24 de mayo. En el caso de otros trece países que tienen firmados convenios con España, el plazo se alarga hasta el 15 de enero.
Organizaciones de inmigrantes, como la Federación de Asociaciones de Rumanos (Fedrom) y Rumiñahui, solicitan que los plazos para poder participar se alarguen dado que los ciudadanos solo han tenido un mes para realizar todos los trámites burocráticos necesarios para votar: empadronarse y presentar “una declaración formal de manifestación de voluntad de ejercer el derecho de sufragio en España en las elecciones municipales”, según ordena la normativa.
El presidente de Rumiñahui, una asociación hispano-ecuatoriana, Vladimir Paspuel, se queja de las dificultades de ese proceso: “Nos pilla en fechas fatales en las que la gente tiene la mente y el corazón en las navidades, pensando en enviar algo a sus familiares y con dos días muertos en los que no se facilita atención por las fiestas”. Además, explica que los horarios de información son limitados mientras que los laborales se amplían en estas fechas.
El Gobierno, además, retrasó la campaña informativa para el voto de este colectivo. El Ministerio del Interior esperó hasta el 15 de diciembre para lanzarla, mientras que el proceso comenzó quince días antes. El PSOE y el Partido Xcrearon campañas paralelas ante la ausencia de la oficial.
“Estoy en contra de que haya que pedir permiso para votar”, agrega Miguel Fonda, de Fedrom, que considera que los tratados internacionales que permiten el voto de inmigrantes de trece países no deberían existir, sino que se debería permitir votar “por años de residencia”. Así, varias asociaciones han constituido la plataforma Nuevos Ciudadanos para reivindicar ese derecho sin necesidad de convenios suscritos por España con otros países.
El INE calcula que hay un total de 422.008 residentes de la Unión Europea que pueden acudir a las urnas por primera vez en España y un total de 342.647 personas procedentes de los países con los que España tiene tratados. En las municipales de 2011, sólo un 12% de la poblacion inmigrante acudió a las urnas. La socióloga experta en migraciones Amparo González Ferrer atribuye la baja participación a que los “plazos son muy cortos” y a las trabas que la Administración pone a quienes acuden a registrarse.
Dos millones de votos desde el extranjero
El Gobierno también ha olvidado a los más de dos millones de españoles que viven en el extranjero. El plazo para los que viven de manera permanente fuera de España puedan registrarse para votar termina este miércoles. La Marea Granate, un movimiento formado por emigrantes, denuncia que “no es posible encontrar información en ningún sitio web oficial de Consulados, Embajadas o Ministerios” sobre el proceso de inscripción, que obliga a estar censado en la institución correspondiente para rogar el voto. Para aquellos que se encuentren de forma “temporal” (válido un año), el periodo se abrirá a partir de que se convoquen oficialmente los comicios.
La Marea Granate también lanzó una campaña informativa para los emigrantes españoles en la que explica el proceso que hay que llevar a cabo e incluye un mapa en el que sitúa las oficinas en las que se pueden registrar.
IU ha exigido al Gobierno que amplíe el plazo para que “los casi dos millones de españoles que viven fuera y para los 800.000 que se han incorporado recientemente como consecuencia de la crisis” puedan registrarse. El diputado Gaspar Llamazares adviritó de que en las europeas votó menos de un 2% de los censados en el exterior.
via iniciativa debate
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