Delegación venezolana en la OIT denuncia intentos de regular el derecho a huelga

DESPIERTEN TRABAJADORES DEL MUNDO LAS CÚPULAS EMPRESARIALES DEL NEOLIBERALISMO QUIEREN QUITAR Y REGULAR EL DERECHO A HUELGA
La delegación venezolana de trabajadores que participa de la 101 Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que se celebra en Ginebra, Suiza, denunció y se opuso de manera tajante a las consideraciones presentadas ante la Conferencia, que pretende la regulación del derecho a huelga de las organizaciones sindicales del mundo.(COPAEN 2012). El delegado titular de Venezuela en la "Comisión de Aplicación de Normas" de la citada reunión, Carlos López, señaló en su intervención que la propuesta del grupo de empresarios ante la OIT representa una agresión hacia los derechos fundamentales que se garantizan en la mayoría de las Constituciones de los 177 países miembros y la violación del convenio 87 de la OIT, referido a la libertad sindical. En contacto vía skype, este domingo, López, quien es miembro de la Confederación Bolivariana de Trabajadores Socialistas (CBTS), reafirmó la denuncia que se hizo en Ginebra, y expresó que se trata de "una arremetida de parte de los sectores empresariales, donde participa de manera vergonzosa Fedecámaras, en componenda con los empresarios mundiales". "Los empresarios están intentando que la conferencia de la OIT apruebe una medida que restrinja, que elimine, que acabe con el derecho a huelga de los trabajadores del mundo, están aplicando una especie de chantaje, buscan que se apruebe que los países que son violadores del derecho a huelga no sean investigados por las instancias de la OIT dispuestas para esto", describió. Asimismo, resaltó López que esta actitud forma parte de un plan que pretende suprimir los derechos de los trabajadores, especialmente en los países europeos, que actualmente encabezan múltiples huelgas y protestas contra el sistema capitalista y la aplicación de paquetes económicos neoliberales que han llevado a la quiebra de sus naciones y a la pérdida de los derechos sociales de los trabajadores. "Esta situación la vemos muy peligrosa, es una arremetida que tienen los empleadores en contra de los trabajadores del mundo que han venido luchando por la defensa de sus intereses, creemos que es una respuesta para intentar escarmentar, reprimir y acabar con las protestas de los compañeros griegos, españoles, franceses, que de manera muy valiente han empezado a direccionar su voto hacia tendencias progresistas que rechazan el poder multinacional", explicó. Resaltó que ante estas acciones de los sectores empresariales, la respuesta del Grupo de Trabajadores ha sido la unidad y el rechazo contundente. "Ha habido respuesta casi unánime de todas las delegaciones de trabajadores desde el miércoles, cuando los empresarios presentaron la propuesta. Se dio un gran movimiento de unidad, todos los trabajadores de todas las tendencias se han venido concentrando para enfrentar esta embestida que se está dando en el seno de esta conferencia", comentó. En la Conferencia general de la OIT participan tres grupos principales, el grupo de los trabajadores, el grupo de los empleadores y el grupo de gobierno, cada uno integrado por varios representantes y un delegado o vocero oficial de cada país miembro de la OIT. Europa: bastión de la embestida empresarial contra los trabajadores Con la presentación de estas consideraciones ante la mayor organización multilateral del trabajo en el mundo, se continúa una línea de acción que se viene gestando en el seno de la Unión Europea (UE), donde se ha planteado un proyecto de reglamento comunitario que pretende regular en el nivel europeo el derecho de huelga. La grave crisis económica que afecta a Europa ha desembocado en múltiples protestas en países como Grecia, España, Portugal, Italia y Francia, por la aplicación de paquetes económicos altamente restrictivos y la merma de los derechos sociales de los ciudadanos, quienes protagonizan de manera constante huelgas y manifestaciones para exigir la restitución de sus derechos. Ante esta oleada de protestas masivas, sectores empresariales y políticos promotores del modelo capitalista han emprendido una ofensiva institucional y jurídica en Europa, con miras a minimizar las huelgas de trabajadores, que se expresa de manera clara con el llamado Reglamento Monti II, que pretende igualar el derecho a huelga con el derecho a la prestación de servicios. El primer cuatrimestre del 2012, la tasa de desempleo en la UE alcanzó un 11,1%, es decir, que 24.667 millones de personas no tienen trabajo. Esa tasa es más dramática en países como España o Grecia, donde el desempleo alcanza el 24,3% y el 21,7% respectivamente, de acuerdo a cifras de Eurostat, la oficina de estadísticas de la UE. Grecia, España y Portugal, entre otros países, han protagonizado en 2012 numerosas manifestaciones, huelgas generales, paros selectivos de sectores como transporte, turismo, marina, ferrocarriles, educación e industria, con presencia masiva del pueblo en las calles, que han llevado a la directiva neoliberal a tomar medidas que regulen la participación popular en la lucha por sus derechos fundamentales.

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