Hasta desde el PSOE se piden ya elecciones generales

El Imparcial

El PSOE hace balance tras la debacle electoral del pasado domingo. Mientras desde el seno socialista se insiste en que no habrá elecciones anticipadas como ya lo anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sectores y federaciones socialistas van por el camino contrario y piensan que agotar la legislatura puede traer un daño todavía aún mayor en las urnas que el registrado este domingo.

La resaca electoral del 22-M amenaza con llevarse a Zapatero por delante. Pese a que desde el aparato del partido en Ferraz se insiste, en palabras de José Blanco, en el anuncio que hizo el presidente del Gobierno en la noche del domingo en el sentido de que no adelantará las elecciones generales, sectores y federaciones del PSOE van por el camino contrario y consideran que mantener el calendario electoral hasta marzo de 2012 podría provocar un daño todavía aún mayor en las urnas que el registrado este domingo. Además, el hecho de que destacados dirigentes del Gobierno intentando “escaquearse” del desastre electoral, responsabilizando sólo a Zapatero, empieza a provocar tensiones internas.

El mensaje de Feraz es férreo. Ni dimisión de Zapatero ni adelanto de las elecciones generales. Simplemente mantener el calendario político previsto, con la apertura del proceso de primarias para elegir al sucesor de Zapatero como candidato a la Presidencia del Gobierno, que se hará realidad en el Comité Federal de este sábado, y echar la culpa del desastre electoral a la crisis económica, pero como hiciera anoche el secretario general del PSOE, sin asumir la autocrítica ni reconocer los errores en la gestión de la misma.

Analistas políticos consultados por “El Imparcial” consideran que el PSOE ha entrado en un proceso de descomposición interna imparable y que las fisuras y grietas son más que evidentes. El primer movimiento crítico, incluso desde miembros del propio Ejecutivo, se dirige hacia José Luis Rodríguez Zapatero, al que acusan de ser el responsable de la debacle. Pero, ¿qué pasa con el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, la ministra de Defensa, Carme Chacón, o el propio ministro de Fomento y vicesecretario general del partido, José Blanco? Las fuentes consultadas se preguntan si es que en estos últimos años no han estado presentes en las reuniones del Consejo de Ministros, donde se han aprobado las medidas económicas que no han sido capaces de evitar los casi cinco millones de parados en España y la crisis económica.

En este punto, la llamada que ha hecho este lunes Chacón a la “reflexión” sobre las causas de la derrota electoral, ha sido contestada por su compañera en el Gobierno, Trinidad Jiménez. La titular de Exteriores ha recordado a su compañera de Gabinete que también ha sido responsable de la gestión de la crisis como miembro del Ejecutivo. "La ministra de Defensa y la ministra de Exteriores son miembros del mismo Gobierno. Formamos parte del mismo Gobierno prácticamente el mismo número de años, con lo cual somos solidarias. El Gobierno es algo coral. Tomamos las decisiones en el Consejo de Ministro. Los miembros del Gobierno estamos todos en la misma situación”, afirmó.

Añadiendo en esta línea, desde los socialistas catalanes, a los que pertenece Chacón, se ha lanzado el mensaje de que es necesario un adelantamiento de las elecciones generales. El PSC se teme que si se celebran los comicios en 2012 el desastre electoral del pasado domingo puede incluso ser bueno. Fuentes socialistas reconocen que las previsiones económicas de aquí a fin de año no son nada buenas y que el malestar de los españoles será aún mayor.

Otros barones, como Guillermo Fernández Vara o José María Barreda, han ido un día después de la derrota en la misma línea. El candidato socialista a la Presidencia de la Junta de Extremadura, que puede obtener si pacta con IU, no ha dudado en manifestarse a favor del adelanto electoral. Vara ha admitido que las políticas del Gobierno funcionan y de ahí el castigo electoral. Barreda, el gran derrotado en estos comicios además de Zapatero, no ha dudado en solicitar a su partido un cambio ideológico.

Desde el PP, el mensaje es el mismo: “elecciones generales, ya”. La agonía de la economía española no puede prolongarse ni un día más. Rajoy ha insistido, como lleva haciendo desde hace muchos meses, en que Zapatero no puede mantenerse al frente de un Gobierno que ha fracasado estrepitosamente en la gestión de la crisis. Los populares no se han dejado llevar por la euforia de la victoria y han mantenido las claves que les han permitido conseguir su mayor éxito en unas elecciones autonómicas y municipales: trabajar por la creación de puestos de trabajo y recuperar a España como una potencia económica.

En el otro lado de la moneda, Bildu. Horas después de convertirse en la segunda fuerza política en el País Vasco tras la decisión del Tribunal Constitucional de permitir su presencia en los comicios del pasado domingo, la coalición proetarra, como la definió el Tribunal Supremo, no ha dudado en pedir la legalización de Sortu y en reclamar más beneficios penitenciarios para los presos de la banda terrorista ETA.

España 2011-Acceso al resultado de las elecciones.