KAOSENLARED.NET --
Una noticia titulada “Seísmo financiero en el seno de la revolución bolivariana” que incluye varias dosis de tergiversaciones y alguna que otra media-verdad alinea, de nuevo, al periódico español en la formación anti-socialista de los medios de masas que normalmente manipulan las informaciones para predisponer al lector contra el Gobierno Bolivariano de Venezuela.
Público nos informa de que el Gobierno de Venezuela ha intervenido varias instituciones financieras, creando un “terremoto político y financiero en las entrañas de la revolución bolivariana”. El diario publica que “¿Se trata de una nueva fase de expropiaciones de la Revolución? No. Los grupos financieros intervenidos pertenecían a empresarios emergentes de la boliburguesía, la nueva clase social surgida al calor del chavismo, enriquecida gracias a sus negocios con el entorno del Estado.”
Debe ser muy débil el calor que el “chavismo” da a los “boliburgueses” cuando no oculta sus desmanes y los juzga como a cualquier ciudadano que quebranta la ley.
Además Público , recoge las declaraciones del Secretario General del partido de derecha Acción Democrática, Henry Ramos Allup quien lleva acusando al gobierno que dirige Hugo Chávez de corrupción varios meses, amenzando con presentar una lista de corruptos “boliburgueses” que finalmente no ve la luz. Estas vez sus declaraciones fueron en el mismo sentido, “se va a poner de manifiesto la complicidad, por no decir la coautoría, de funcionarios públicos y particulares para conformar enormes y groseras fortunas.”
No deja de sorprender que el diario español de voz a un político que denunció fraude electoral en el referéndum revocatorio sin aportar pruebas y varias horas antes de conocer los resultados, del que sospechan que reparte fajos de billetes bajo cuerda, que agrede a periodistas que no le hacen preguntas cómodas y que no deja pasar a la policía tras denunciar un atentado contra su sede política mientras manipula las posibles pruebas de los hechos.
Ramos Allup nunca ha sustentado con pruebas sus acusaciones y sus actos nunca han dejado de estar bajo la sombra de la sospecha, parece no tener la suficiente credibilidad como para citar sus palabras donde acusa despreocupadamente sin tener pruebas al gobierno venezolano.
El periódico Público, más preocupado en vincular esta situación con catástrofes financieras pasadas, no sabe el día de publicación de la noticia, 12 de diciembre, “Si el Gobierno decide la rehabilitación de los bancos, sus clientes recuperarán su dinero. Si se apuesta por la liquidación, será el Fondo de Garantía quien se haga cargo de 10.000 bolívares por cuenta, que puede ascender hasta 30.000. Chávez ha garantizado que los clientes recuperarán su dinero antes del 24 de diciembre.” Un día antes el Gobierno de Venezuela había pagado la deuda de los bancos a 16.000 clientes. Unos 59 millones de Bolívares Fuertes.
Por supuesto al diario español le queda espacio para decir que todo esto ha sucedido en un “Mal momento para Chávez“. Público nos informa sobre la inflación que azota a Venezuela, “una inflación que alcanza el 26% anual”, alta sin duda, pero al diario se le olvidó comentar que esta tasa es 4,6 puntos menor que la de hace un año.
De una forma ambigua, “y con los estudiantes en pie de guerra tras el asesinato de un joven manifestante en la fronteriza Táchira”, Público incita al lector a pensar que si Chávez tiene problemas con los estudiantes ya que estos están en pie de guerra evidentemente contra él, sino no le darían problemas, por un asesinato. ¿Es Chávez el responsable de ese asesinato? Leyendo Público sería lógico pensarlo ya que el diario dice que Chávez está pasando por un “mal momento” y una de las justificaciones del periódico español es que los estudiantes están el “pie de guerra” por un asesinato sin dar más datos, por lo que han hecho una conexión entre las dos situaciones.
Al seguir leyendo y al igual que ha sucedido durante toda la noticia, no encontramos datos ni pruebas que sustenten lo publicado por el periódico Público, en este caso el asesinato de un estudiante. El asesinado se llamaba Jesús Eduardo Ramírez Bello y murió a causa de la convocatoria de unos estudiantes opositores de la Universidad Nacional Experimental del Táchira a atacar la Universidad Bolivariana de Venezuela, con la complicidad del ultra derechista gobernador de Táchira, César Pérez Vivas que retiró a la policía cuando los estudiantes derechistas atacaron a la otra universidad.
Sólo este dato ya desmiente la generalización del periódico español que sostiene que “los estudiantes” están contra Chávez, cuando sólo los estudiantes de las universidades privadas lo están.
Si Público hubiera informado de la causa de la muerte del estudiantes no le hubiera servido para inflar el supuesto “mal momento” por el que pasa Chávez, al igual que si hubiera puesto dato de la inflación en su contexto.
El broche de oro lo pone Público con una sentencia, “es el político menos valorado por los latinoamericanos, con 3,9 puntos. Su gran enemigo, Obama, lidera el ránking del Latinobarómetro 2009 con 6,4.”
Para Público este dato representa “una bofetada estadística” contra Chávez. Lo sería si quienes viven la realidad venezolana, los que van a votar o no por él hubieran expresado ese dato, pero siendo el conjunto de Latinoamericanos expuestos diariamente a la información sesgada como la que nos ofrece Público cuando se refiere a Chávez sin poder contrastarla quienes opinan así, sólo se evidencia el gran trabajo anti-Chávez de los grandes medios de comunicación.
De todas formas confiar en un estudio elaborado por encuestadoras privadas con ciertos intereses no es muy acertado. En ese estudio se puede observar que el 81% de los venezolanos encuestados consideran muy importante a las empresas privadas y bastante más del 50% considera que las nacionalizaciones han sido malas para el país. Esos datos se contradicen con el 62% de los venezolanos que en las pasadas elecciones presidenciales ratificaron esas políticas, el 95% de los venezolanos que disfrutan de los beneficios de esas políticas (MERCAL o los centros sanitarios), o la mayoría aplastante que permitió mediante elecciones la reelección de los cargos públicos venezolanos este mismo año.
0 Comentarios
DEJA UN COMENTARIO