El gobernante Partido Popular (PP) obtuvo hoy la mayor votación en las elecciones europeas de España, pero sufrió un fuerte golpe al obtener 16 eurodiputados, ocho menos que en la anterior legislatura.
Escrutados el 97 por ciento de los votos, el PP obtuvo 26,03 por ciento de la votación, mientras en segundo lugar se ubicó el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) con 23,03 por ciento y 14 diputados, siete menos que en los anteriores comicios.
Izquierda Plural, una coalición liderada por Izquierda Unida, se reafirmó como tercera fuerza del país con 9,99 por ciento de los votos y seis eurodiputados, cuatro más que en las elecciones pasadas.
La participación a las urnas fue de 45,86 por ciento, similar a la de 2009 cuando se registró 44,9 por ciento.
La sorpresa de la votación la brindó el partido Podemos, de orientación de izquierda y de reciente creación, que obtuvo 7,94 por ciento de votos y ganó cinco asientos.
La centroderechista Unión Progreso y Democracia (UPyD) también amplió su espacio en el Parlamento Europeo al obtener 6,4 por ciento de la votación, lo que le permite pasar de uno a cuatro escaños.
Coalición por Europa con 5,45 por ciento mantuvo tres, Izquierda por el Derecho a Decidir pasó de uno a dos eurodiputados, Ciudadanos (de nueva creación) obtuvo dos asientos, la coalición Los Pueblos Deciden y Primavera Europea ganaron un asiento cada una.
En total 10 fuerzas políticas españolas obtuvieron representación en el Parlamento Europeo, en relación con seis partidos en la legislatura que termina.
Las elecciones ratificaron las previsiones de caída de la popularidad de PP y PSOE y el ascenso de la izquierda y otros partidos de nueva creación.
Al margen de la importancia de estas elecciones en el contexto europeo, los resultados aportan elementos sobre los cambios que se vislumbran en la política nacional, que apuntan a la pérdida de mayoría absoluta del PP.
El llamado bipartidismo, dado por la preponderancia del PP-PSOE en los últimos años, también fue afectado fuertemente, pues entre ambas organizaciones no alcanzan el 50 por ciento de los votos. De mantenerse estas tendencias las elecciones generales previstas para 2015 obligarían a un gobierno de alianzas, cuyos integrantes están todavía por definir.
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