Uno de los grandes escándalos periodísticos del último tiempo en la prensa hispana profundizó más aún este día después de que el periodista italiano Tommasso Debenedetti confesó haber sido quien envió, a tres agencias de noticias, la falsa foto que pretendía mostrar al presidente venezolano Hugo Chávez entubado. La foto fue publicada por el diario El País, en su portada, a ancho de página. Sólo después de publicada los editores se dieron cuenta del engaño y tuvieron que retirar del mercado sus 340,000 ejemplares, pese a que muchos de ellos ya habían sido vendidos.
"La falsa foto de Chávez, que tomé de un video de YouTube, la envié la semana pasada a una agencia de Costa Rica, a la agencia estatal venezolana y a Prensa Latina (cubana) y nunca me imaginé que iría a terminar en la primera plana de El País", declaró Debenedetti a la agencia de noticias Notimex.
La foto fue tomada de este video de YouTube mostrando un procedimiento médico en un hombre acromegálico:
La foto, según la nota original, era propiedad del diario y se prohibía su reproducción. Sin embargo, Debenedetti dijo que la envió a tres agencias. Supuestamente, era de un momento de la intervención quirúrgica de Chávez, enfermo de cáncer, e internado desde el 11 de diciembre en un hospital exclusivo de La Habana, Cuba.
Sin embargo, explica la nota de marras, "El País reconoció que no pudo verificar independientemente las circunstancias, el lugar o la fecha en la que se había realizado la fotografía".
Debenedetti afirmó haber enviado la foto semanas atrás a una agencia de noticias en Costa Rica, a otra en Venezuela y a Prensa Latina, la agencia estatal cubana, y afirmó ignorar cómo había llegado finalmente a manos de El País.
El video se encuentra en YouTube de manera pública.
No es la primera vez que Debenedetti se encuentra mezclado en escándalos inducidos relacionados con los medios sociales y la prensa. En junio pasado, creó una cuenta de Twitter falsa y envió supuestamente a nombre de Valérie Trierweiler, cónyuge del hoy presidente francés François Hollande, un mensaje de apoyo a una rival del socialista, Olivier Falorni, quien también había sido pareja de Hollande.
En ambos casos, el periodista afirmó que lo había hecho para mostrar las falencias, primero, de las redes sociales, y ahora, de los más importantes medios de prensa.
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