La bolsa española bajó este martes el 1,61 por ciento y concluyó la sesión en el mínimo anual de 7.936,40 puntos, nivel desconocido desde finales de marzo de 2009, perjudicada por el descenso de las plazas internacionales y de los grandes valores ante el miedo de los inversores a la recesión económica. La prima de riesgo de la deuda española se situaba poco antes del cierre del mercado de deuda en 334 puntos básicos, siete menos que al cierre de ayer.
Tras comenzar la sesión con pérdidas e intentar inmediatamente después un tímido rebote, el índice perdía a las 14,00 horas los 8.000 puntos, una cota que mantenía desde comienzos del pasado mes de agosto, para situarse al filo de las 14,30 horas en 7.926 unidades después de caer el 1,67 %.
En Europa, con el euro a 1,40 dólares, poco antes del cierre del mercado español sólo subía Londres, el 0,5 por ciento, mientras que bajaban el resto de las principales plazas europeas: Milán, con la huelga general en Italia, bajó el 1,98 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 1,29 por ciento; París, el 1,02 por ciento, y en Fráncfort el índice DAX 30 cerró con una bajada de un 0,99%.
Los principales valores del Ibex 35 concluyeron con pérdidas: Iberdrola, el 2,12 por ciento; Banco Santander, el 2,01 por ciento; Telefónica, el 1,89 por ciento; BBVA, el 1,67 por ciento, y Repsol, con el petróleo Brent más caro, en 111,5 dólares el barril, bajó el 0,7 por ciento.
El descenso que acumula el Ibex desde comienzos de año rozaba el 20 %, en tanto que el índice general de la Bolsa de Madrid retrocedía el 1,04 %.
La confirmación de que la desaceleración de la economía europea es un hecho y la perspectiva de una apertura a la baja en Wall Street lastraban también los mercados europeos, casi todos en negativo a esa hora.
El euro se cambiaba a media jornada a 1,2033 francos pero antes del anuncio de la decisión del SNB llegó a 1,1019 francos.
Muchas empresas suizas ya habían revisado a la baja sus pronósticos de beneficio por el empeoramiento de sus posibilidades de exportar tras la fuerte apreciación del franco las últimas semanas ya que es el refugio de los inversores en momentos de crisis e incertidumbre.
La renta variable europea eludió la referencia negativa de algunos mercados asiáticos, si bien se mantiene un elevado nivel de nerviosismo en los mercados.
Los bancos comerciales de la zona del euro depositaron ayer en el Banco Central Europeo (BCE) 166.848 millones de euros (151.097 millones el viernes) pese a que la entidad monetaria sólo remunera los depósitos con un interés del 0,75 %, lo que muestra el aumento de las tensiones en el mercado de dinero, donde los institutos se prestan entre ellos.
Wall Street empuja a la baja las bolsas del Viejo Continente
Wall Street abrió con nuevos descensos ante los renovados temores sobre la crisis de deuda en la zona euro y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, bajaba alrededor del 2 % media hora después del inicio de la sesión.
Ese índice, que agrupa a 30 de las mayores empresas cotizadas de Estados Unidos, restaba a esta hora el 2,01 % (-226,07 puntos) para colocarse en las 11.014,19 unidades, al tiempo que el selectivo S&P 500 descendía el 2,09 % (-24,54 enteros) hasta 1.149,43 puntos y el índice compuesto del mercado Nasdaq cedía el 1,79 % (-44,51 unidades) hasta 2.435,82 enteros.
El parqué neoyorquino abría teñido de rojo la primera sesión bursátil de la semana, después de la festividad del Día del Trabajo el lunes en Estados Unidos, mientras arreciaban un día más los temores sobre la desaceleración de la economía europea y sobre la dimensión de la crisis de deuda en la zona euro.
Wall Street retomaba así las pérdidas del viernes en una apertura que era tan preocupantes que la Bolsa de Nueva York (NYSE) puso en marcha la llamada "Regla 48", que permite suspender la difusión pública de precios de mercado antes de abrir las negociaciones cuando la condiciones de volatilidad extrema amenazan con causar retrasos en el inicio de la sesión.
Las turbulencias económicas en Europa y el escepticismo ante la recuperación de la economía estadounidense, después del desesperanzador dato de empleo divulgado el viernes, llevaron este lunes a los inversores de Wall Street a decantarse marcadamente por las ventas, una tendencia que afectó a todos los sectores.
Destacaban especialmente los retrocesos del energético y el financiero, que se dejaban en su conjunto el 3,27 % y el 3,08 %, respectivamente, mientras que el de las materias primas caía el 3,05 % y el tecnológico perdía el 2,36 %.
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