El Gobierno español utiliza las recientes acusaciones contra Venezuela como una especie cortina de humo para ocultarle a su pueblo el derrumbre económico, político y moral del cual es víctima la nación ibérica, producto de la fuerte crisis global que trasngrede al mundo.
La denuncia fue formulada por el vicepresidente del Grupo Venezolano del Parlamento Latinoamericano (Parlatino), diputado Carolus Wimmer, quien se encuentra en España participando en una serie de actividades del pueblo español en solidaridad con Venezuela y la Revolución Bolivariana.
El parlamentario destacó que según el último informe de la Unión Europea (UE), después de la quiebra económica de Grecia, le siguen naciones como España e Irlanda, citando al país ibérico como el del más bajo poder adquisitivo en el continente, cuyo declive económico va en ascenso.
Durante el VII Encuentro de Plataformas Estatales de Solidaridad con Venezuela, celebrado los días 28, 29 y 30 de marzo en la comunidad de Asturias, España, se denunció que los pequeños y medianos inversionistas se retiran del país ante el temor de perder su capital por los embates de la crisis económica.
El secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de Venezuela sostuvo que el informe de la UE fue citado por la revista El Economista, de fecha 29 de marzo, y señala que, al menos, 9% de las familias españolas se encuentran seriamente afectadas por la crisis.
“Son familias que no poseen recursos suficientes para cancelar gastos y servicios públicos como agua, gas y electricidad, que no pueden comer productos como pollo, carne y pescado; y que no poseen calefacción durante la epoca de invierno, ni mucho menos teléfono o televisión”, denunció Wimmer.
El diputado agregó que al menos 5 millones de españoles se encuentran desempleados, especialmente jóvenes, una cifra que representa más del 10% de la población. Mientras otro porcentaje se encuentra amarrado a pequeños contratos de uno, dos o tres meses, sin gozar de beneficios laborales.
La revista también destacó una encuesta cuyo resultado arroja que aproximadamente 51% de los españoles no confía en la protección de las autoridades públicas ni en la legislación; y que 69% de los españoles denuncia manejo fraudulento de empresas y comercios, siendo el índice más alto de Europa.
“El Gobierno español acusa a Venezuela de vínculos con la ETA y no presenta pruebas. Pero, por otro lado, no responde a las acusaciones del portavoz del Partido Popular en el parlamento europeo, Jaime Mayor Orejo, quien recientemente denunció la complicidad y cooperación del gobierno del presidente José Luis Rodríguez Zapatero con esta organización”, precisó Wimmer.
Durante el Encuentro de Plataformas también también se debatió la actitud de indiferencia de los medios ante denuncias contra el sistema político español.
“No reseñan la denuncia sobre el gasto de 2.3 millones de euros que el gobierno de José María Aznar efectuó para que le fuera otorgado a este Mandatario la medalla de oro del Congreso de Estados Unidos, una condecoración que nunca llegó a concederse”, enfatizó.
En definitiva, Wimmer reafirmó que el Reino de España trata de esconder esta quiebra política, económica y moral con la campaña propagandística contra Venezuela.
La denuncia fue formulada por el vicepresidente del Grupo Venezolano del Parlamento Latinoamericano (Parlatino), diputado Carolus Wimmer, quien se encuentra en España participando en una serie de actividades del pueblo español en solidaridad con Venezuela y la Revolución Bolivariana.
El parlamentario destacó que según el último informe de la Unión Europea (UE), después de la quiebra económica de Grecia, le siguen naciones como España e Irlanda, citando al país ibérico como el del más bajo poder adquisitivo en el continente, cuyo declive económico va en ascenso.
Durante el VII Encuentro de Plataformas Estatales de Solidaridad con Venezuela, celebrado los días 28, 29 y 30 de marzo en la comunidad de Asturias, España, se denunció que los pequeños y medianos inversionistas se retiran del país ante el temor de perder su capital por los embates de la crisis económica.
El secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista de Venezuela sostuvo que el informe de la UE fue citado por la revista El Economista, de fecha 29 de marzo, y señala que, al menos, 9% de las familias españolas se encuentran seriamente afectadas por la crisis.
“Son familias que no poseen recursos suficientes para cancelar gastos y servicios públicos como agua, gas y electricidad, que no pueden comer productos como pollo, carne y pescado; y que no poseen calefacción durante la epoca de invierno, ni mucho menos teléfono o televisión”, denunció Wimmer.
El diputado agregó que al menos 5 millones de españoles se encuentran desempleados, especialmente jóvenes, una cifra que representa más del 10% de la población. Mientras otro porcentaje se encuentra amarrado a pequeños contratos de uno, dos o tres meses, sin gozar de beneficios laborales.
La revista también destacó una encuesta cuyo resultado arroja que aproximadamente 51% de los españoles no confía en la protección de las autoridades públicas ni en la legislación; y que 69% de los españoles denuncia manejo fraudulento de empresas y comercios, siendo el índice más alto de Europa.
“El Gobierno español acusa a Venezuela de vínculos con la ETA y no presenta pruebas. Pero, por otro lado, no responde a las acusaciones del portavoz del Partido Popular en el parlamento europeo, Jaime Mayor Orejo, quien recientemente denunció la complicidad y cooperación del gobierno del presidente José Luis Rodríguez Zapatero con esta organización”, precisó Wimmer.
Durante el Encuentro de Plataformas también también se debatió la actitud de indiferencia de los medios ante denuncias contra el sistema político español.
“No reseñan la denuncia sobre el gasto de 2.3 millones de euros que el gobierno de José María Aznar efectuó para que le fuera otorgado a este Mandatario la medalla de oro del Congreso de Estados Unidos, una condecoración que nunca llegó a concederse”, enfatizó.
En definitiva, Wimmer reafirmó que el Reino de España trata de esconder esta quiebra política, económica y moral con la campaña propagandística contra Venezuela.
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